Enviada a "El Tribuno" de Salta
"La
desafiante respuesta de Aurelio Narvaja, titular de la editorial
Colihue, por el escándalo de los libros con contenido pornográfico que
el Ministerio de Educación envíó a las escuelas públicas de Mendoza es
patética. Si algún desprevenido creía que el envío de esos libros era un
error, ya habrá entendido que no; que ese es el modelo educativo K. Los
despectivos calificativos para los docentes indignados con esos
contenidos (prejuiciosos, pacatos, retrógrados, etc.) demuestra la
soberbia y bajeza moral del Sr. Narvaja, eferente intelectual y moral
del modelo K. Si ser prejuicioso, pacato y retrógrado es no querer la
porquería que ilustran esos libros para nuestros hijos, pues lo soy y a
mucha honra. Prefiero para mi país un proyecto educativo a largo plazo,
basado en la buena educación, el respeto, la honradez, la solidaridad,
la caridad, etc.
Tomás Méndez, Ciudad